The Housemaid

La Asistenta es un thriller psicológico que sigue a Millie Calloway, una joven con un pasado turbulento que necesita desesperadamente un nuevo comienzo. Cuando consigue un trabajo como asistenta interna para la adinerada familia Winchester, parece la oportunidad perfecta. El salario es generoso, la casa de piedra rojiza de Nueva York es hermosa y tendrá alojamiento y comida incluidos. Al principio, el puesto parece ideal. Nina Winchester parece ser la esposa y madre perfecta, aunque tiene reglas y expectativas peculiares. Andrew Winchester es un marido encantador y exitoso que viaja con frecuencia por trabajo. Su hija, Cecelia, es una adolescente típica. Pero a medida que Millie se instala en su papel, comienza a notar patrones inquietantes. El comportamiento de Nina se vuelve cada vez más errático y controlador. El encanto de Andrew enmascara algo más siniestro. La casa misma parece tener secretos en cada rincón. Millie pronto se da cuenta de que está atrapada en una situación peligrosa donde la línea entre empleada y prisionera se ha desdibujado. A medida que descubre los oscuros secretos de los Winchester, debe encontrar una manera de escapar antes de convertirse en otra víctima de su fachada perfecta. La novela aumenta la tensión a través de la creciente comprensión de Millie de su situación y sus intentos de sortear la manipulación psicológica de sus empleadores. McFadden crea una atmósfera claustrofóbica donde cada interacción conlleva amenazas ocultas y cada amabilidad puede ser una manipulación.

La empleada doméstica demuestra que las amenazas más aterradoras a menudo provienen de los lugares donde deberíamos sentirnos más seguros. El thriller psicológico de McFadden construye magistralmente la tensión a través de la revelación gradual de la verdadera naturaleza de los Winchester y la creciente comprensión de Millie de su situación. La novela sirve como un escalofriante recordatorio de que la riqueza y los privilegios pueden ocultar la oscuridad, y que escapar a menudo requiere ver a través de las fachadas que la gente construye cuidadosamente. Para los lectores que disfrutan del suspense doméstico con giros bien ejecutados y protagonistas con los que se puede empatizar, La empleada doméstica ofrece una tensión psicológica satisfactoria desde la primera hasta la última página.